India
Día 1. Madrid-Delhi
Día 2. Delhi
Día 3. Delhi
Día 4. Delhi-Tren a Shimla-Shimla
Día 5. Shimla
Día 6. Shimla
Día 7. Shimla-Delhi
Día 8. Delhi
Día 9. Delhi-Benarés
Día 10. Benarés
Día 11. Benarés (Sarnath)
Día 12. Benarés
Día 13. Benarés-Agra
Día 14. Agra-Jaipur
Día 15. Jaipur
Día 16. Jaipur-Pushkar-Udaipur
Día 17. Udaipur
Día 18. Udaipur
Día 19. Udaipur-Kumbhalgarh-Ranakpur-Jodhpur
Día 20. Jodhpur
Día 21. Jodhpur
Día 22. Jodhpur-Delhi
Día 23. Delhi-Madrid
Presupuesto
Comida
Alojamiento
Transporte
Día 2. Delhi
Día 3. Delhi
Día 4. Delhi-Tren a Shimla-Shimla
Día 5. Shimla
Día 6. Shimla
Día 7. Shimla-Delhi
Día 8. Delhi
Día 9. Delhi-Benarés
Día 10. Benarés
Día 11. Benarés (Sarnath)
Día 12. Benarés
Día 13. Benarés-Agra
Día 14. Agra-Jaipur
Día 15. Jaipur
Día 16. Jaipur-Pushkar-Udaipur
Día 17. Udaipur
Día 18. Udaipur
Día 19. Udaipur-Kumbhalgarh-Ranakpur-Jodhpur
Día 20. Jodhpur
Día 21. Jodhpur
Día 22. Jodhpur-Delhi
Día 23. Delhi-Madrid
Presupuesto
India es un país muy barato. Durmiendo y comiendo en hoteles y restaurantes que no sean de lujo, utilizando el transporte público y con algún capricho de vez en cuando (como alquilar un coche privado), se puede pasar sobradamente un mes con 800 euros. Nosotros dormimos por menos de 10 euros la noche y comimos a veces por 2 euros.
Comida
Con un buen presupuesto la comida india es exquisita. Así lo fue en un restaurante de lujo en Delhi, que nos salió por unos 12 euros. Para economizar nosotros tiramos de restaurantes baratos y hay que decir que no siempre se come a gusto. El pollo tandoori y el arroz son el alimento básico en la India cuando no te fías mucho de la higiene del restaurante.
Alojamiento
Dormimos siempre en hostales baratos y no tuvimos ningún problema para encontrar alojamiento sobre la marcha. En Jaipur y Udaipur nos alojamos en hoteles, aunque también baratos. Casi todas las habitaciones tenían baño privado y algunas aire acondicionado.
Transporte
Utilizamos el tren y el autobús. Ambos medios son baratos, pero lentos, muy lentos. El tren no va a más de 40 km/h. y el autobús parecido. Pasamos alguna noche en el tren y la experiencia es agradable. Son compartimentos de seis literas, sin puerta para cerrar el pasillo y sin aire acondicionado. Los compañeros de viaje indios suelen ser simpáticos y alguno nos invitó a probar su comida. Constantemente pasa un vendedor de té que no descansa ni por la noche y cuya voz anunciando su mercancía (chai (té), chai, chai...) se acaba metiendo en tu sueño. Para recorrer el Rajastán alquilamos un todoterreno con conductor. Esto eleva un poco el presupuesto, pero se economiza tiempo.
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